El uso del chupete en los bebes es uno de los accesorios más utilizados durante los primeros años de vida de nuestro pequeño.

A pesar de la mala fama que ha adquirido en los últimos años, el uso del chupete en bebés con dientes no tiene por qué desarrollar ningún efecto negativo en los pequeños.

Es importante saber retirar a tiempo el chupete al bebé, su retirada permite que la dentición se desarrolle correctamente. Debemos retirar el chupete a los 18 meses, nunca más tarde de los 2 años o asumiremos el riesgo de tener deformaciones que precisen de tratamiento posteriormente.

Hasta aproximadamente los 2 años de edad, el chupete usado correctamente resulta muy útil para los padres y los bebés. Ayuda a los pequeños a relajarse, a dormir mejor y mantener un sueño constante durante la noche, y también participa en el correcto desarrollo del reflejo de succión para alimentarse.

Este accesorio es el sustitutivo ideal al dedo en la necesidad esencial que tienen los bebés de chupar entre toma y toma. El chupete no interfiere en el desarrollo del paladar y los dientes si su uso no es excesivo ni prolongado.

Cuando el chupete no se deja de usar en la edad adecuada, podría estar asociado a diferentes alteraciones en la boca del bebé.

Entre las principales alteraciones en la boca del bebé provocadas por el chupete destacan:

La falta de contacto entre los incisivos superiores e inferiores, mordida abierta, cuando la boca está cerrada. Debido al uso del chupete, los incisivos superiores quedan desplazados hacia delante, mientras que los inferiores se desarrollan hacia dentro.

Debido al uso del chupete la forma del paladar y las arcadas dentarias pueden verse afectadas. Debido a la posición de los músculos de la boca por el reflejo de succión constante en una etapa de desarrollo acelerada como son los primeros años de vida del bebé.

El resalte de los dientes frontales superiores, conocido como dientes de conejo, es un rasgo común en los niños que han usado el chupete de manera, además de un problema estético, esta anomalía podría estar asociada a problemas en el habla, respiratorios, o afectar a la hora de comer.

Los odontopediatras y ortodontistas nos hacen unas recomendaciones para una utilización saludable del chupete en nuestros hijos:

Limitar el uso del chupete a 18-24 meses de edad, su uso prolongado puede dar lugar a mal oclusiones.
Favorecer el uso del chupete frente a la succión del dedo.
No usar el chupete para retrasar la hora de la comida.
No mojar el chupete con ningún alimento o bebida dulce, para no exponer los dientes del bebé a la acción de las bacterias del biofilm dental.
Evitar limpiar el chupete con la boca de ningún adulto para no hacer contaminación cruzada de microorganismos.
Disponer de diferentes chupetes e ir cambiándolos con frecuencia, para evitar que el niño se encariñe y resulte más fácil su retirada.

 

USO Y ABUSO DE CHUPETES (Sociedad Española de Odontopediatría)