Los efectos de las bebidas azucaradas en nuestra salud dental.
El azúcar puede ser dulce pero los efectos que el consumo de azúcar causa en la salud no lo son. Beber grandes cantidades de bebidas azucaradas puede ocasionar serios problemas en nuestra salud bucal.
Nos centraremos en los problemas que afectan a nuestra boca, los dientes, la lengua, las encías la boca en general, no obstante, muchos de estos productos afectan perjudicialmente al cómputo de nuestra salud global.
Estas bebidas son altamente consumidas por la población mundial y suponen uno de los “caballos de batalla” con los que tienen que luchar los odontólogos de todo el mundo dentro de nuestras respectivas clínicas.
Seguimos sin ser conscientes del gran peligro que supone para nuestra salud bucal consumir bebidas azucaradas, tales como los refrescos, las bebidas alcohólicas e, incluso, las bebidas consideradas deportivas, de una manera habitual y en cantidades significativas.
Los dentistas, odontólogos y otros profesionales de la salud, debemos alertar y concienciar a la población. Al consumir refrescos, bebidas azucaradas o productos que incluyen altas dosis de azúcar refinado, de manera habitual, o de forma irregular pero en grandes cantidades, estamos dándole a nuestra placa bacteriana combustible para atacar nuestros dientes.
La placa bacteriana que está instalada en nuestros dientes, emplea ese azúcar ingerido por nuestro organismo para producir una serie de ácidos que atacan directamente nuestro esmalte, es decir, la superficie dura y superficial que recubre y protege cada uno de nuestros dientes.
Esto se cumple con la gran mayoría de refrescos y productos azucarados, da igual que en su publicidad nos digan que son bajos en calorías, “light”, productos dietéticos o cualquier otra artimaña similar: son productos químicos y ácidos malos para nuestros dientes, malos para nuestra salud.