Las caries de los dientes de leche de tu hijo, son más comunes de lo que crees.
La presencia de caries en los dientes de un niño, normalmente se produce en los incisivos superiores e inferiores. Antes se culpaba al uso inadecuado del biberón como causante de las caries y por eso se las llamaba también «caries del biberón». Ahora se sabe que las caries de la primera infancia son producto de la exposición al azúcar, la acción de las bacterias de la boca y la resistencia del diente.
Las caries de la primera infancia suelen producirse por el uso excesivo del biberón, y del chupete si se unta en sustancias dulces, vasos con boquilla y el abuso de bebidas y alimentos dulces. La exposición frecuente y prolongada a líquidos dulces hace que las bacterias de la boca utilicen estos azucares para formar ácidos que atacan el esmalte dental.
El ODONTOPEDIATRA es el dentista especializado en niños, es el profesional dental más capacitado para atender a los niños ya que se ha formado y entrenado especialmente, tanto a nivel técnico como a nivel psicológico.
El grado de afectación de la caries, es lo primero que tendrá en cuenta el odontopediatra, lo más normal es que realice alguna radiografía dental. Siempre tendrá en cuenta que hay una pieza definitiva que ya se encuentra dentro del hueso y en estado de formación.
Cuando la infección alcanza la pieza definitiva no habrá más remedio que realizar la extracción del diente de leche, ya que de lo contrario podría provocar una mala formación de la definitiva.
Hay que pensar que los dientes de leche tienen características distintas y que en ellos las caries avanzan rápidamente hasta el nervio. Esto es debido a que en los dientes de leche las proporciones de esmalte y dentina son mucho más pequeñas que en la dentición definitiva. De manera que, proporcionalmente, el nervio es muchísimo más grande.El odontopediatra tiene muy en cuenta la edad de cada niño y su grado de madurez. Para empezar, los padres deben evitar transmitir al niño la ansiedad que puedan tener frente al dentista y a la consulta dental. Lo más seguro es que esa ansiedad tenga su origen en la niñez. Y es precisamente eso lo que queremos evitar. Afortunadamente, los tiempos han cambiado muchísimo e ir al dentista no tiene por qué ser una experiencia desagradable.
En la primera visita lo que se hará es solamente el diagnóstico. Es posible que los padres insistáis en hacer ya el tratamiento en esta primera visita pero esto suele ser contraproducente y no es recomendable. Para un niño ya es suficiente estrés ir a la consulta dental, sentarse en un sillón rarísimo con una gran luz y conocer al doctor/a, suficiente para un solo día.
El odontopediatra enseñará al niño una buena técnica de cepillado y asesorará a los padres sobre los alimentos y hábitos poco recomendables para tener una buena salud dental. En los niños, las revisiones se deben realizar cada seis meses ya que así es más fácil detectar los problemas a tiempo.
El odontopediatra es el profesional más adecuado para tratar la caries a tu hijo, y en todos sus tratamientos y relación con él tiene muy en cuenta la edad y grado de madurez del niño.