La oferta actual de dentífricos y colutorios en supermercados y farmacias es múltiple hasta tal punto que llega un momento en que no sabemos entre cuáles elegir. Ante tal disponibilidad, no son pocos los ciudadanos que dudan y se plantean qué pasta deben elegir y utilizar.
Es muy recomendable elegir la pasta en función de la situación de nuestra boca y si se tienen dudas preguntanos para que te aconsejemos.
Hoy en día podemos encontrar todo tipo de pastas, desde la tradicional contra la caries, pasando por específicas para sensibilidad, periodontales (encías) o las denominadas blanqueadoras.
El problema más común y extendido es la caries por ello las principales recomendaciones para tener una boca libre de caries pasan por una constante higiene bucal, utilizar un dentífrico que lleve una cantidad adecuada de flúor y realizar al menos una visita anual a nuestra consulta. Tampoco hay que olvidar que no se debe enjuagar la boca con agua tras el cepillado con dentífrico ya que limita notablemente el efecto de la pasta. Es más recomendable escupir la pasta.
Tipos de pasta
Las pastas que se recomiendan para prevenir las caries son aquellas que tienen una cantidad de flúor. ¿Pero cuánto debe llevar?. Nosotros, aconsejamos que el dentífrico tenga una cantidad de flúor superior a 1.000 partículas por millón (ppm). ¿Por qué? El objetivo es aumentar la resistencia del esmalte, actuar frente al crecimiento de bacterias que producen el sarro y, además, permitir remineralizar la capa del esmalte y hacerla más fuerte.
De hecho, comprar aquellos que estén por debajo de 1.000 partículas por millón (ppm) es equivalente a cepillárselos sin pasta en lo que a protección de caries se refiere.
En el caso de los niños, el contenido de flúor de la pasta de dientes a utilizar, viene determinado por el riesgo de caries y la edad del niño ya que en los menores la ingesta de pasta es muy común. Las pastas dentales con menos de 1000 ppm. de flúor no han demostrado tener efectos preventivos y por eso se recomienda su uso como herramienta de aprendizaje al inicio del cepillado con la salida de los primeros dientes. En menores de 6 años, se recomienda pasta de 1.000 ppm. En cantidad de mancha o grano de arroz hasta los 3 años y cantidad como un guisante hasta los 6 años. A partir de los 6 años se recomienda pasta de 1450 ppm. en cantidad de un guisante.
Cuando comenzamos a tener sensibilidad dental por culpa del desgaste del esmalte, también podemos comprar una pasta dentífrica destinada a tapar aquellos poros del diente que nos provocan tanto dolor porque el nervio se encuentra cada vez más cerca de la superficie y los cambios bruscos de temperatura se notan en exceso.
En los casos de enfermedades periodontales como la gingivitis (que provoca el sangrado de las encías) también es posible utilizar una pasta de dientes más fuerte que además de la parte de flúor para combatir las caries utilice algún antiséptico. Eso sí, no deberán utilizarse más de 15 días seguidos. Y si el problema continúa, debes acudir a nuestra consulta porque puede tratarse de algo más importante y podremos diagnosticartelo.
Respecto a las pastas dentífricas que se hacen llamar blanqueadoras cabe reseñar que su efecto es muy limitado ya que por sí solas no son efectivas más allá de una limpieza efectiva de restos en los dientes. Sí son recomendables como apoyo de nuestro tratamiento de blanqueamiento dental.