Los colutorios son un complemento perfecto y muy recomendable después de llevar a cabo la base del cuidado bucal: el cepillado, la seda dental y los cepillos interproximales.

¿Cuál debemos elegir? Al igual que con los dentífricos, en el caso de los colutorios existe hoy en día una gran variedad de oferta.  Por ello, te recomendamos que si no tienes claro qué tipo de enjuague es el más adecuado para tu boca, nos preguntes.

 

Necesitaremos una solución para cada problema. Según nuestro objetivo, elegiremos uno u otro pero lo que recomendamos es que no contenga alcohol. De hecho, un paciente que no haya tomado ninguna bebida alcohólica podría dar positivo mínimo en un control de alcoholemia, la razón enjuagarse la boca con un colutorio con alcohol. Le ha pasado a más de un paciente. En el caso de niños no se recomienda su uso en edades inferiores a 6 años.

Actualmente hay muchos tipos de enjuagues, desde los que ayudan a combatir la caries (gracias a su carga de flúor) a los que alivian la halitosis (mal aliento) pasando por los indicados para la sensibilidad dental y la gingivitis, entre otros. Es muy importantes recordar que no debes enjuagarte la boca ni beber nada hasta media hora después de utilizarlo, si quieres que sea efectivo en tus dientes.

Los colutorios con clorexidina merecen una mención aparte. Se trata de un antiséptico que elimina e impide el desarrollo de las bacterias de la boca. Su uso debe ser indicado por un profesional sanitario y sólo debe aplicarse los días pautados por dentista ya que un uso prolongado puede acabar manchando los dientes. Suele estar indicada, antes y después, tras una cirugía de implantes, exodoncias, extracciones así como  gingivitis, periodontitis lesiones graves de la mucosa.

En definitiva,  el colutorio es un complemento muy interesante pero nunca sustituye a un buen cepillado y a la seda dental por lo que si quieres contar con una sonrisa de diez, toma nota de nuestros consejos.